La industria del comercio minorista se ha caracterizado a lo largo de la historia por su constante dinamismo y evolución, pues el consumidor fácilmente cambia sus expectativas, comportamientos y necesidades de consumo.
Después de la pandemia, se han producido cambios económicos drásticos. A pesar de la crisis inflacionaria que se vive a nivel mundial, el crecimiento esperado en las ventas del sector Retail para este 2023 se proyecta en 6.5%.
💡Conoce aquí cuáles son 10 las principales tendencias de consumo y orienta tus estrategias, decesiones y planes de crecimiento para este 2023:
1. Automatización auténtica: Se planea una inversión tecnológica por parte de los retailers.
2. Los consumidores ahorran: La inflación y el coste de vida llevará a las personas a ser metódicas con el dinero.
3. Eco-económico o consumo sostenible: Las marcas ayudarán a los consumidores en el ahorro y cuidado del planeta
4. Las marcas le apuestan a experiencias digitales integradas: El cliente sigue siendo digital pero ahora quiere optimizar su tiempo en la web.
5. Entretenimiento y juego: Es una prioridad para el consumidor, como método para socializar, conectar y liberar estrés.
6. Vivir aquí y ahora sin deudas: El consumidor tiene placeres de corto plazo con responsabilidad financiera. El retailer debe ofrecer opciones de financiamiento.
7. Divertirse y relajarse será un motivo para comprar: Los retailers se preocuparán por aportar diversión para atraer a los consumidores.
8. Foco en la igualdad de género: La diversidad, equidad e inclusión importan en los negocios de Retail.
9. La vida en perspectiva: Los consumidores están abrumados con tantos cambios y las empresas deben proveer servicios centrados en las necesidades inmediatas.
10. Jóvenes y disruptivos: La generación Z expone sus creencias, el contenido real, crudo y relevante llama la atención.
En conclusión, el consumidor espera una experiencia completamente omnicanal e integrada, que le brinde un proceso de compra satisfactorio, donde sus emociones sean el eje principal. Los clientes están cada vez más conectados, informados y son más exigentes; por eso, los retailers deben conocer cuáles serán los patrones de consumo y adaptar rápidamente sus procesos y recursos para estar al nivel de la demanda y ser claramente competitivos.